Las bodas por lo regular están llenas de estrés y no solo para los novios, incluso para los curas, por eso en Brasil ya están tomando medidas para acabar con esa arraigada ‘tradición’ de que la novia debe llegar ‘elegantemente tarde’.
Los curas brasileños declaran la ‘lucha’ contra las novias impuntuales. Las chicas que lleguen tarde a su propia boda, tendrán que pagar una multa de 300 dólares cuando esto ocurra.
La medida fue propuesta por el sacerdote Roberto Carrara, de la Catedral de Nuestra Señora de Lourdes de la ciudad de Apucarana. Según el clérigo, ya está cansado por las constantes demoras de las ceremonias. Por eso decidió tomar una fianza de cada pareja antes del enlace.
Este dinero se guarda intacto hasta el día del matrimonio, pero después todo depende de la misma mujer: si aparece a tiempo, entonces la suma completa será devuelta a la pareja, si sucediera lo contrario, se entrega para las necesidades de la parroquia.
Así que por favor ponderemos más el invaluable valor de la puntualidad.
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